miércoles, septiembre 17, 2008

HABLANDO DE ACTITUD

No es necesario, aprovechar el tiempo total, caerá en su intento, en su lamento, de ser un solo movimiento alrededor de los portentos, planetas a lo lejos, de humanos y caducos, de hermanos y mamelucos, mentales, emocionales y económicamente sóbrales. Los vástagos de lo sutil, de ritmo inútil, melancolía fértil, en los peldaños de la gran escalera que nuestra espera, desespera en la falta de influencia, por lo de caducar, educar y sentir jugar, los juegos de la felicidad, que en esos peldaños infinitos, de citas nuevas y de emociones viejas, ilusionan a los primos, que mucho amor vivo, se enamoran hasta de las piedras, como personas capaces, audaces y kamikazes. Intervienen los factores, de la rectitud en la ineptitud, de ir un poco a plenitud, de sinceras carcajadas, que en forma de caras raras, se entrometen entre abrir la boca y rechinar los dientes, en que queremos los detalles de nuestra hermosa calle, en sus pasos y regazos, en sus huellas por las plazuelas, en todas las costumbres adquiridas, para todas esas vidas que pasean por esa villa, de flores, olor a coliflores y cloacas en los balcones. Lamentar, no estudiar, para hacer llegar la variedad, de palabra hasta una simple casa, donde acontece que prevalece, lo material sobre lo social, lo místico por los físico, lo escondido por la libertad de un niño, para reír a carcajadas ante todos los hechos que en un túnel estrecho, hacen de cada uno un solo pensamiento y multitud de palabras que, cuando nos da la gana, conquistamos con alabanzas y añoramos, por ser sinceros, para que no nos avergüencen, en tamaño intento de estar contentos, delante de un cuento, que no se lo cree nadie, ni practicando, ni remontando, ni tan si quiera hablando, de las palabras que por simples, se resisten a ser dichas por uno de vieja tinta, de severo cordaje, cantero palabraje y certero tonelaje. Sin tiempo al blindaje, uno se afloja el cordaje e inicia el viaje, hasta una nueva luna, un nuevo semblante y una nueva hora de amor alucinante.

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