¿ EL PUENTE SOBRE EL DIA QUE...?

Y un grupo determinado, ensemismados en la tarea de hacer la guerra, su particular pelea, de comodos plazos, en los descansos, en los repasos que el cuerpo, daria a un plazo, en los equivocados y sonoros capazos, de voces y ronques, de viajes y no tienes, en extensos anillos, entrelazados, falsos y polucionados, en las sonrisa que saben a risa, a vacias prisas y conversaciones palizas. A los que acompañan el canto de la muerte, la muerte vacia, de cualquier día, sin avisar, sin torcer los planes de futuro, que dentro de cada uno, ha formalizado, aconsejado y clavado. Sin avisar de que me voy, sin paginas de hoy, sin libros del mañana, donde recocer la labor encauzada, es preciosa, comprensible y temerosoa, la mente extraña, que enmaraña toda esa patraña de fiestas a mansalva, de descansos natos, de aburrimientos netos, de siluetas planas, con las heridas piensan, y aprietan, en cada una de las grietas que cada cual ostenta, cada uno, amena, sin dar clavo y golpe, por ser torpe, la mente de sobte. Sigue el ritmo, de este cataclismo, de pensamientos muy antiguos, demasiado ambiguos y con cierto cinismo, que muchos emplean en tiempo de màxima crisis, económica, en tiempos de periodos inciertos, de monedas falsas y escasas, de bolsillo abierto a todos los aciertos, de dejar la pelota un tanto rota, para intentarla votar, sin repararla, total, con el agua al cuello y la mirada, en andaduras siempre al suelo, el suelo de unos días, de un puente cualquiera, que si colgante fuera, pasarian las/los valientes, los/las indulgentes y sobre todo, los grandes amantes del colgante aliciente, que para eso se suda por la frente, en contingentes continentes y en la fiel promesa, de ser una astuta calleja, a la que ir de fiesta, pasear la perra y obstruir un sin fin de tierra, para no dejar de socavar, en los pensamientos de los demás, ajenos a los acontecimientos, perplejos por los cimientos, de una obra simple, potente y tan larga como un puente. ¿Mira que somos obedientes, eh!?

DONDE EL AMOR ME LLEVE

Donde el corazón me lleve, en guia breve ,de viajes sin peligros y montañas tenues. Donde liberar la capacidad de tener tus pensamientos, enmudecen el invento, de lo falso y el descontento, donde la profunda estupidez, de la mente circustancial, anochece y pasa a ser , amigo del conocer y amiga de la intima estima, del amor apresurado cuando sin pensarlo, acontece y es promulgado. Allá donde el amor que tanto me pertenece, realiza sus ciertas eses, donde prevalece los sentimientos y las condiciones en verdaderas idioteces, en los vientos que crecen y en las lluvias que enriquecen, el brillo de sus pendientes, con la respiración por testigo, de un gran amigo, el corazón, la satisfacción o el mismo sentido, de lo interior, del calor y de la obsesión, por esa instintiva posesión, de un valor en progreso, de cientos de años en consejos, de millones de busquedas a lo lejos, en caras que no dicen nada, ni palabras, ni guiñadas, incluso ninguna postura sofisticada. Andar donde te amen de verdad, si sabes que es eso? Que sepas que tus palabras valen más, signifiquen esa cantidad, de bondad, serenidad y toda la capacidad de ensenyar, esa estimable felicidad que muy particular, crees encontrar en la razón de ser, en el calor de dar, en la obsesión de existir y en la pasión de sentir, el amor y su condición, de ser amado por la indosincracia, de tu mente privilegiada, que dando cuenta de nada, haces un verso estimable, de las palabras amables, que de tu mente muy fien salen.

SENDERO DE LO PERECEDERO

El sendero que dia a dia traspasamos en la vida, el duro pensar de las mentes plagadas, de pensamientos limitados, de sufrimientos colgados y claves en las llaves, de futuros enclaves con todas sus llaves, diferenciadas de los temores, por los frutos interiores, donde las enseñanzas, alabanzas y los míticos dioses, son como voces en el destino, quizás en tu camino y en un mundo de doctrinas básicas, perseguidas, por lo que opinas, en la voluntad, en la posesión de la verdad, en lo que amas tan total y la brillante seducción, hasta llegar al último escalón, de la alta estima, que cualquier día, eres consciente, consecuente y conveniente. En la ignorancia nueva, de una vieja existencia, donde la mente atormenta, lo que no se inventa, lo que en realidad lamenta que el ser uno mismo, el tener ese camino, solo y magnífico, el de ser fenómeno de otros tiempos, donde el regalo tan preciado, como las manos, los pies y hasta tener un hermano, son estimados, meditados y reflexionados, en cierto modo identificados, con la felicidad encaminados y en un sin fin de conceptos, emularlo muy dentro. Donde la verdad de identificar, lo que es negar, en especial al caminar por errores, sectores y controles, de todos los colores, perturbados por los años, aconsejado por los redaños y acostumbrados a poner el paño, de una comilona sabrosa, en el que tan solo hay sorpresas, de palabras y promesas que nos dicen y comunican, la buena noticia, de ser nosotros los que caminamos locos, por no decirlo de otro modo. Catálogo en mano, letras con dibujos y el flujo de un canto, que entretiene, pretende y suspende, el pensamiento que pende, de reacciones en septiembre, esperando el otoño, de lluvias, colores en las montañas y sensaciones , todas ellas con mil perdones y más allá de las ilusiones.

¿Y QUE PIENSO DE MI PENSAMIENTO?

¿Y que piensas tu de mi? No pienso nada, observo en el horizonte, los obstaculos vienen no sé de donde y acontece, que me crece, el pelo, las uñas y no me pertenecen. Per, ¿Me ves en algun momento? No te veo, ni te observo, ni opino nada de tu acontecimiento, no es verdad que existas en mi pensamiento, pues solo el tiene las llaves de ser directo, con las palabras, con los objetos que sostenemos, en nuestro cuerpo, en nuestra larga, extraña y sana mentalidad humana, te digo más no es humana, sin ser compleja, no es templada sin ser oreja, no llega a ser ciudad, ni carrer ni tampoco panel de mi sinceridad atleta. Puedo llegar a contener mi pensamiento sin que intervenga, los momentos de otros, los intentos de otras y las c aracteristicas de ser pasotas, de un ruido extraño, sin cuerpo ni tamaño. ¿Y que piensas tu de ti? No pienso nada de mi, sin sentir que no existo, sin ver que soy de verdad, para dar, para pensar que estoy dando, lo que creo que no tengo, lo que pienso que no ando, lo que intento pensar que dentro está el vacio más cuerdo. Mi mente feliz, no sabe existir en este mundo de acompañamientos diversos, en este mundo de enmudecimientos ajenos, en el mundo redondo que sabemos que existe, que puede ser falso, con su forma de circulo basto, con las orbitas desencajadas, del sol y la luna, y ser de noche hasta en las costuras. Pensar en colores, cuando el vacio siente temores, de hacer interiores, plantear conversores y no tener la forma de cohete, de cimbrete y de colmar de bienes, lo necesario, lo precario y lo que conviene. El pensamiento es vacio, para otorgar su deseo al que no lo ve, no lo quiere y tampoco apetece.

LA ENERGIA DE CADA CUAL

Pensando en la energia, la física, la mental y la que nos queda al palmar, pensando de cuando en cuando, la encaminamos hacia el cuerpo vacuo, hacia la acción directa, de un movimiento , de un sufrimiento y de todos los conocimientos que adquiriendo vas. Pensando en el entretenimiento que un simple gesto, plantea nuestra gesta, nuestra cabeza indigesta y en nuestro sentido de la fuerza, realiza en linea recta, la tibieza, la recompensa y el sabor de la nobleza, al realzar, en todos los movimientos un ligero y predispuesto, poema de andar, alegria y felicidad y sin gastos aparentes, movimientos contundentes y ahorros por los dientes, la energia se realiza, cuando los cuerpos atizan el fuego enfatiza y la coordinación en el amor, transforma su condición, de coordinador, estupor y la luz de un mentor, que acompanya en su campaña, la energia que canta, sus poderes entrelazan y hacia arriba, en forma de espiga, realza la naturaleza basta, de un brazo entusiasta, que sonrie en forma aborigen, los cuentos de palabras que el empuje, la muralla y la fuerza batalla, para dejar el tercer movimiento, como granos de intentos, la siempre llamada de la joven animada, de las noches habladas y los troncos muy tiesos, en forma de gran fuego, en bebidas calientes y contratos aparentes, los detalles pendientes y el color de un pelo que imita el bello sabor del aguardiente. Energia mental, energial vital para sacar los justos de esos sustos que el corazón sin disgustos nos suele dar, regalar y aposentar, para una real calamidad, pero a la larga sabiendo encausar una gran verdad, la energia física por la mental, la energia de mover la mente por el amar demente y los encantos aparentes, sin ser hirientes y pensar que entre la gente, se intercambian, los conocimientos, los hechos pendientes y la energia positiva que siempre nos lleva a lo mejor de esta vida, saber lo que es es el camino de cada quien, pensando y gastando sus bonitos pies.

LA VOZ DE LA MONTAÑA

En la voz y en el temor, la conciencia da su propia opinión, en los sonidos mentales, en los casos termales, alli donde las temperaturas iguales y las pericias conceptuales, las opiniones se apuran, en tropel se ayudan y el deber de no hacer, se unen y sin orden alguno, enternecen con voces de chantajes, idioteces y pillajes, en el interior, enarteces, los trapos de colores, los vientos surtidores y lo que acontece, con conspiradores diferentes, de miradas perfectas, de pretendidos rumores, en todas las orejas que de Freud se alejan, de su particular opinión, del sexo y el amor, de la esquizofrenia y la droga dura y añeja. La visión de un dictador, donde la voz del pueblo, se hace paterno, origen tierno y de menú bello, para todos aquellos que con espada en lo plebeyo, dando saltos hasta el cuello, parodian las tribus de un viejo y lejano pueblo, que sus costumbres y sus anhelos, les hacen inocentes, costumbreros y no llevar sombrero, que al sol de lo que acontece, se mecen en porches de robles, de espinas comestibles y mucho cuernos movibles. Donde las montañas son enfatizadas por las viejas zarzas que arden sin parar, sin parar de hablar de sus proezas, de sus delicadezas y de sacar al pueblo de sus rarezas, aunque el pueblo no calla, hambre pasa y la zarza, dale que dale con la palabra en esa voz de la montaña, donde la edad siempre rapida pasa y el colega, que es tu espera hace de la paciencia, ese saco de peras, que en tu hermosa nevera se incluye y de veras, concluye con un fino hilo, de experto asteta, con chanclas de tela y camisas desgarradas, por los años de pasadas, lavadas y malas coladas, de la voz en la montaña.