Y vi con verdadero calor, rubor y a la vez emoción, como el conocimiento venia en lo más inquieto, en los papeles envueltos como interminables palabras de conocimientos, de futuros responsables y hechos inciertos, de amor por las tardes ya al caer el sol. Y obervé ya de madrugada como Agora desarrollaba su pasión por la ciencia, pr la paciencia y la inocencia, de cuatro palabras en desorden puestas, con cuatro hechos como respuestas , dejando un vacio interminable, insufrible e indiscutible. Era el principio de los tiempos, el que hacer de unos pueblos que de religión alimentaban, los ojos, sus ventajas y la ambición de una política desmesurada, el poder establecia y las espadas aplicarian, la palabra del hombre hecho Dios, la palabra del pueblos hecho todo un destino y la palabra de una falsa, empobrecida por las zizañas que unos cuantos listos de la vida, hacen parecer a otros, la mejor moto, la verdad establecida y votar en la vida, para un lado o para otro aunque para ello sin más, allá que matar, a un amigo, a tu vecino, a tu pareja y a cualquier pieza que por animada y sonriente, siempre le brillan los dientes y su derecho a vivir en muy inminente. Mis lagrimas tambien por Agora que en sus papeles apergaminados, guardan el secreto del alba, los planetas y el amor con franqueza, prueba de ello, el silencio, el destello y lo que no veo palabras de aliento.
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