PROPIETARIOS DE NUESTRA CONCIENCIA

Incrustados en nuestra propia muralla, donde en su parte de penumbra, el sol no llega ni alumbra, la sombra de la pobreza en la conciencia, revolotea y maldice los tiempos que con afanes felices, dan a la persona y los que dicen trabajadoras, una voz de expendedoras, de un solo pensamiento, con acción y fundamento, con una cierta organización, coordinación en la resistencia más ajena a los intereses, al grito de todos concientes y a los hechos más feacientes, a los contextos con provechos, a los desencantos que vienen dando, en tiempos a veces malos y próximos, a veces buenos y alejados, pero la mayoria, en forma de egoistas pertenencias que encayadas en la vida, hacen de unos minutos, puros comecocos, palabras del vacio, que rellenan con falta de sigilo, lo vulgar del dicho, el marujeo más atrevido y los engaños, que en forma de apaños, realizan con tanta prisa los que cantan con suave brisa, en forma pegadiza y aludiendo, sus bajos instintos, sus vinos tintos y toda la marcha que como una indudable farsa, hacen de su coloreada corbata, el simbolo de los idólatras, de los que van por la puerta de atras y de los que traicionan a su propia persona, en beneficio de un solo camino, en facil permiso y la comoda pagoda. La ingerencia en nuestras conciencias, viene dada por la importancia de nuestras baladas, la engañosa parte de baba y el prodigio de hacer en un solo sitio, todos los truquillos que como socialmente amigo, deja de entreveer en un solo vicio, su falta de amor, prestigio y certeros prejuicios. La conciencia es nuestra , personal e intrasferible, apetecible por sorpresona, mal intencionada y preparada para adaptarse a una vida propia, tapada por los influjos de rayos iluminados, cielos azules y oxigenados, y la visión del paisaje mejor, del evento sin inventos, que en conciencia o no, hace los segundos de una escasa vida, la que más se prodiga, impresionista si pintas y colorear, con todos los que alla, la parte de la playa, que hoy te toca y mañana andarás como un idiota.