viernes, junio 18, 2010

EL FRESCO AMANECER DE LA PERSONA










Y me tiendes la mano como agua en el desierto, este desierto de arenas secas y frías, donde las conciencias parecen tranquilas, donde el susurro de los sueños no dejan en paz a sus dueños, donde la lluvia a pesar de ser limpia, deja ríos de tinta, manchas en toda su salsa y deshumanizadas en todas las casas, donde algunos y algunas no se dan cuenta que en esta sola vida, pasamos muy rápido y el tiempo de hablar es poco, nada comprensible y todo un juego de caminos temibles, donde las sensaciones dan lugar a unos amores terribles, por engañosos y destructibles, los sueños más admisibles, donde la verdad esconde lo temibles, miedos y más miedos frustran la marcha hacía delante, equivocaciones miles, hacen del ser humano la razón más incomprensible, para amar, soñar, sentir y corregir, los puntos que te saltas, las comas que ausentes hacen de la cara una espalda, los brazos y manos que gesticulan con espanto, las situaciones inverosímiles de un claro hallazgo ante las personas y demás humanos. Dejarse engañar, por la belleza superficial, por la mentira más casual, por los labios fríos de inviernos sin sentido y por esas primaveras que volvían muy sinceras, aparentando tibiezas, delicadeza y sonrisas de muecas. Deshumanizados la mayoría hacemos reflexiones sobre economía, política, basuras y melancolías, sobre amores frustrados, hijos engañados y colmillos de plástico barato. Deshumanizados los corazones, no tenemos ya razones para aguantar todo esto, las razones que este mundo nos deja sin remedio, abusos incondicionales, economías por el suelo y en bancos un tanto diferenciales, papel y metal en algún paraíso fiscal, mentiras y lucha contra las personas que luchan por mantener una sonrisa, ese fondo de te en su vasija y un tono de orgullo, que con sonrisas de capullo, se nos queda siempre a más de uno cuando , abuso tras abuso, la felicidad me da uso, a un sol radiante, un despertar como currante y el orgullo de ser persona antes que jefe, petimetre, alcahuete, chocolate del loro, del PP incluso otros, y verte todos los días por que esa sonrisa y mirada en compañía, lo que sinceramente me da, ser persona y felicidad.

1 comentario:

Anónimo dijo...

No imaginaba existir para merecer tan bellas y profundas palabras, no imaginaba que en mis sueños, tu rostro me diera la dulce mañana, no imaginaba la persona que eres, la miradas que me conmueve y tu amor entre la vida y el sentir de mi cuerpo, me imagino todo y es lo que quiero.
M.